Dos claves para celebrar tu boda perfecta: planificación/organización y buen criterio al elegir, siempre acorde al presupuesto. Lo segundo corresponde a lo personal, pero la buena planificación puede seguir el patrón que te proponemos. Y te aseguramos que funciona.
12 meses antes
Tras el compromiso, iniciar la organización con un año de antelación es lo mínimo a contemplar para organizar tu boda perfecta. Lo primero es debatir un presupuesto, seleccionar la fecha y responder a preguntas clave que sirvan de punto de partida: ¿por lo religioso o por lo civil? ¿En exterior o en interior? ¿De tipo tradicional o cóctel? ¿Íntima o con todos vuestros amigos y conocidos? Son algunos ejemplos de preguntas que os podéis hacer.
Con lo esencial ya decidido y un número aproximado de invitados, hay que empezar a ponerse en contacto con proveedores, comenzando por el catering y el salón o hacienda. Según dónde viváis o si elegís temporada alta o baja, es posible que esto lo tengáis que hacer incluso con más antelación.
11 meses antes
Ya tenéis lo esencial, la fecha y el sitio. Ahora hay que seguir contactando con los proveedores: maquillaje y peluquería, fotografía, flores, música, transporte (en su caso)… A mayor demanda, más urgente será la contratación, por lo que te sugerimos que empieces por los profesionales de peluquería y estética, la fotografía y la música.
10 meses antes
Es buen momento para enviar en “Save the date”, o simplemente comunicar a los invitados la fecha, aunque vuestro círculo íntimo ya la sabrá. También podéis pensando un hilo conductor si queréis una boda temática.
9 meses antes
Aseguraos de conocer cuáles son los documentos necesarios para completar los trámites, por ejemplo, si tenéis que hacer cursillos prematrimoniales en caso de haber elegido una boda por lo religioso.
También es buen momento para empezar a barajar destinos de la luna de miel y mirar catálogos de vestidos de novia y novio, complementos, ramos, etc. Id mirando también las invitaciones.
6 meses antes
Es buen momento para hacer las elecciones que ya habéis estado barajando: el vestido y el traje, la luna de miel, la decoración, el menú, las invitaciones, etc. Comunicadlo a vuestros proveedores para ir cerrando detalles.
4 meses antes
Es momento de planificar la prueba del menú y de ir haciéndose con todos los complementos que llevarán los novios, desde las alianzas a los zapatos, el resto de joyas o el tocado.
También deberíais ir pensando los detalles de la celebración: partes, lecturas, personas que van a intervenir, etc.
3 meses antes
Toca hacer la prueba de menú y, en el caso de la novia, la de peluquería y maquillaje. También podéis confirmar la decoración que queréis o lo relacionado con las flores.
Tampoco deberíais esperar más para repartir las invitaciones, y confirmar a todos aquellos que recibieron el “Save the date” que tienen una cita. Y, por supuesto, decidir con qué regalos los vais a agasajar.
Aprovechando que entregas las invitaciones, preguntad por especificaciones de menú para comunicarlo al catering.
2 meses antes
Para entonces deberíais tener claro cómo va a ser la ceremonia y repartir los roles convenientes. Es decir, preguntar a quienes queréis que intervengan si pueden hacerlo y confirmar.
Además, si pensáis poneros en manos de alguien que os ayude a abrir el baile, es el momento de hacerlo.
1 mes antes
Id confirmando la asistencia para cerrar la lista de invitados y poder organizar las mesas, comunicad a los proveedores aquello que deban tener en cuenta (por ejemplo, el menú especial sin alérgenos al catering) e id cerrando detalles como la luna de miel.
Será también el momento de hacer la prueba de vestuario.
15 días antes
Es momento de hacer las últimas confirmaciones y ultimar los detalles con todos los profesionales a intervenir: preguntar al fotógrafo a qué hora llegará, dar los últimos toques al vestido, indicar al salón qué canción va a sonar a vuestra entrada, etc.
1 semana antes
Será el momento de recoger los trajes y complementos, así como de empezar a valorar qué llevaréis a la luna de miel.
1 día antes
Al margen de recoger el ramo de novia, lo único que quedará es descansar.
Y al día siguiente, tras organizar tu boda perfecta, no habrá más que hacer que disfrutar.