Organizar una boda puede ser tarea caótica y estresante, poner a prueba los nervios de la pareja. Pero no hace falta que cunda el pánico, hay que establecer prioridades y centrarse en ellas para no perder de vista lo esencial: disfrutar cada momento de la organización y del día.
Eso es lo importante, y se puede conseguir en siete pasos.
1. Fijar el presupuesto
Que la organización de la boda comience con la elaboración del presupuesto marcará la hoja de ruta a la hora de hacer elecciones posteriores. Además, para evitar disputas entre los miembros de la pareja, se recomienda atenerse a una cifra que ha sido consensuada.
Fijar el presupuesto pasa también por preguntarse cuestiones relevantes como el número aproximado de invitados, algo que luego será de utilidad.
2. Seleccionar la época favorita del año
Hasta que se pueda elegir una fecha concreta, la pareja puede pensar qué epoca del año le gusta más, siendo populares la primavera, el verano y el otoño. De la escogida también puede depender el tipo de celebración, así que es un buen comienzo.
3. Pensar el tipo de boda y fijar la fecha
Primero, ¿será una boda por lo civil o por lo religioso? Hay que pensarlo no solo por ir viendo qué documentación o importes se requerirán a la pareja en cada caso, sino porque tanto el lugar escogido para la celebración como para el banquete y fiesta posterior (aunque puede ser todo en el mismo lugar) tendrá un número limitado de fechas disponibles en la época del año escogida, además de una capacidad también dada.
4. Anunciar el enlace
Que no haya ausencias destacadas pasa por dar este paso, el del moderno «Save the date». No tiene por qué implicar tarjetas físicas, pueden enviarse por email o a través de las redes.
5. Contratar los servicios imprescindibles
Lo de organizar una boda puede tener muchas aristas en la actualidad, pero no hay que volverse locos. Teniendo la fecha y los lugares, los servicios básicos son el catering, el fotógrafo, el florista (y decoración en general), las invitaciones, los regalos de invitados, el grupo musical y la luna de miel.
6. Hacerse con los atuendos y contactar con los estilistas
Hay quienes es lo primero que hacen y quienes lo dejan para meses antes de la boda. Sea como sea, se incluyen aquí los trajes, zapatos y complementos, las alianzas o los trajes especiales de madrinas, damas de honor y pajes (o similares).
Conviene también fijar con suficiente antelación las sesiones de belleza, sin olvidar la prueba de peinado.
7. Enviar las invitaciones
Será unos tres meses antes de la boda, y aunque habrá cosas que hacer hasta el mismo día, serán solo detalles que pulir. El proceso «organizar la boda» se habrá saldado con éxito.
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Cómo organizar una boda en siete pasos
