La decoración es uno de los elementos que más hay que cuidar en una boda, pues ayuda a que los comensales se sientan cómodos y pasen una estancia agradable. En este aspecto también entran en juego las modas y las dinámicas actuales, de modo que os presentamos algunas tendencias en decoración de mesas muy actuales.
Jugar con los contrastes
Una práctica muy habitual en bodas de día es combinar mesas con mantel y mesas de madera sin mantel. Las primeras son las que utilizan los comensales mientras que las segundas sirven como espacios auxiliares.
Un clásico que nunca falla son los bajo platos de ratán, pero ahora acompañados de vajillas clásicas de estilo vintage y copas transparentes para el vino con copas de color para el agua. En la decoración de mesas también entra en juego la comodidad de los invitados. La silla ha de ser cómoda pero no excesivamente amplia, para poder formar mesas circulares de 10 a 12 comensales (cuidado con las restricciones del Covid). Las mesas con esta disposición facilitan la interacción de los comensales.
En este juego de contrastes tan al día en tendencias en decoración de mesas, ganan mucho protagonismo los manteles con colores vivos y claros, especialmente en las bodas de día. Si la boda es de noche podremos optar por tonalidades más intensas.
La iluminación en la decoración de la mesa
Nuevamente hay que diferenciar entre bodas de día y de noche, pues normalmente en las celebraciones de mañana la luz natural debe ocupar un espacio central. En cambio, para bodas verpertinas o directamente ya entrada la noche, este elemento juega un papel muy importante en las tendencias en decoración de mesas.
Podemos usar bombillas de pequeño tamaño que introduzcan un cielo estrellado en el salón o el patio donde tiene lugar el banquete o bien optar por estas mismas bombillas pero de diferente color, y siempre que no sea una iluminación directa.