Cuando la fecha de boda se fija con bastante antelación, en torno a año o año y medio antes, hay mucho tiempo para planificar y preparar el gran día. Esto puede ser un arma de doble filo para las parejas más desorganizadas, ya que, al pensar que tienen mucho tiempo, tienden a procrastinar.
Organizar tu boda en solo seis meses es posible y, de hecho, puedes hacer exactamente lo mismo que las parejas que disponen de un año o más, solo que menos espaciado en el tiempo. Es cuestión de organizarse y ponerse manos a la obra, nada más.
Cómo organizar tu boda en seis meses
Si habéis decidido que es el momento no hay por qué esperar más.
Sin tiempo que perder
Establece prioridades y comienza a ser llamadas. Lo imprescindible en el caso de una boda clásica: el lugar de la ceremonia, el de la celebración (puede ser el mismo), el catering (que puede proporcionar el mismo salón), las invitaciones, el profesional de fotografía y vídeo y, por supuesto, el atuendo. Solo seis elementos que, con determinación, se pueden gestionar en menos tiempo del que crees.
Prescinde de lo que no es esencial
Organizar tu boda en solo seis meses os servirá para interiorizar lo que es importante: vosotros y vuestra unión. La decoración es algo secundario, y para muchas parejas es suficiente el esmero que catering como el nuestro ponen en la presentación. Si se considera imprescindible, contratarla a través de otro proveedor (posibilidad que ofrece catering El Cine) ayudará a optimizar el tiempo.
No es que haya que prescindir de ciertos detalles como la música, pero sí saber dejarlos en un segundo plano y ser realistas. Si no os ha dado tiempo de elegir los regalos para invitados, no pasa nada, no es esencial. Seguro que lo entenderán.
Adáptate a lo que hay
El contra de organizar una boda con tan poco tiempo es que muchos proveedores ya tendrán otros compromisos para esa fecha. No desistáis en la búsqueda, seguro que hay algún hueco.
Si no, os podéis plantear alternativas, como celebrar la boda en una finca de un amigo o familiar, una cena el viernes o un almuerzo el domingo, días de más opciones de disponibilidad. Recordad además que los meses de diciembre, enero, febrero y marzo se suelen considerar temporada baja para las bodas, lo que también abrirá el abanico. Y dentro de la iglesia y el salón, la lluvia es un factor irrelevante.
Catering El Cine
Cómo organizar tu boda en solo seis meses