Planear una boda civil obliga a un trabajo de preparación y organización igual de laborioso que el de una boda religiosa. Las bodas civiles pueden ser tan bonitas y románticas como las bodas en la iglesia. Os comentamos a continuación cómo planear una boda civil.
Elegir la fecha
Esa es una de las ventajas de las bodas civiles frente a las religiosas. En una boda de este tipo, reservar hecha suele ser más fácil. En cualquier caso, es siempre aconsejable reservar la fecha al menos con seis meses de antelación para evitar sorpresas de última hora.
Una celebración personalizada
Otro aspecto interesante de planear una boda civil es que el nivel de personalización es más alto. Puedes decantarte por una boda rápida, de no más de 15 minutos, o por el contrario, añadir lecturas de amigos y familiares, música o algún tipo de ritual o presentación para hacer de la boda una celebración única e inolvidable.
El traslado hasta el lugar de celebración
Muchas parejas eligen el mismo escenario para la unión matrimonial y el banquete de bodas. En muchos casos es la opción más cómoda. No obstante, hay quien prefiere casarse en un ayuntamiento, un juzgado o un edificio público y posteriormente trasladarse al lugar de celebración.
En este último caso, hay que contratar autobuses o dar a los invitados las indicaciones necesarias para que puedan llegar hasta el lugar.
Si la boda es íntima, en ocasiones el lugar de celebración es una casa grande con jardín, algún restaurante pequeño, un pequeño salón o una casa rural. En estos casos, planear una boda civil más recogida no supone una menor carga de trabajo.
Menú tipo cóctel o banquete
Es también habitual en este tipo de celebraciones, sobre todo si son pocos incitados, servir distintos canapés en lugar del tradicional banquete de bodas. Planear una boda civil tipo cóctel es una buena forma de conseguir que los invitados puedan hablar y mezclarse entre ellos de manera más informal.
Ya sea en bodas tradicionales o bodas en las que se sirven canapés y aperitivos, una tendencia muy actual es la de ofrecer para los postres una mesa de dulces. No es común que en las bodas civiles se proceda al ritual de los novios cortando la tarta.
La decoración
Un último elemento importante para planear la boda civil es la decoración. Si es una boda más pequeña se puede apostar por una decoración tipo DIY, en la que sean los propios novios y sus familiares y amigos quienes preparen los adornos y elementos decorativos.
El consejo final, ya sea para planear una boda civil o de carácter religioso, es organizar todo con bastante antelación y ser muy previsores.
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Cómo planear una boda civil
